Es una voz inventada por el escritor español Eusebio Blasco parodiando el griego en su opereta revisteril "El Joven Telémaco". Eran las primeras sílabas cantadas en un coro formado por mujeres vestidas con escasa ropa, lo que llevó al público a asociar a las coreutas (o más bien, coristas) con esta palabra. Más tarde calificó a mujeres de mala reputación y luego a prostitutas.
El origen de este término que ya han definido los compañeros está en el estribillo de las coristas de la opereta bufa de que habla Furoya "el joven Telémaco" del escritor maño decimonónico Eusebio Blasco. El estribillo en un falso griego cantaba así: Suri panta, la suri panta, / macatruqui de somatén; / sun fáribun, sun faribén, / maca trúpiten sangasimén....La opereta se representó en 1866 en el teatro Variedades de la calle de la Magdalena con mucho éxito. La gente empezó a llamar suripantas a las chicas del coro de vida alegre y algo descocadas. Después llegó la RAE en 1925, mucho más rígida en sus apreciaciones y sentenció: Mujer ruin, deshonesta e indecorosa.
"Según Eusebio Blasco, Isabel II tras la Gloriosa abandonó en palacio entre otras cosas: un reloj secreto confidente de ideas un sí es no suripantescas"