Es un neologismo usado en filosofía inspirado en la teodicea ("mandato de Dios, justicia divina"), suponiendo que el devenir histórico tiene sus propias reglas y que por supuesto carecen de empatía hacia el ser humano. De etimología griega está formado por las voces ιστορια (historía "saber") + δικη (dike "justicia"), y se interpreta como la "justicia ineludible de la historia, la justificación de los hechos porque así debían ocurrir".
"La historiodicea no es ni mala ni buena."
1. Trátese del concepto de justicia histórica, de la búsqueda de una justificación o explicación del mal en la historia en la humanidad. La historiodicea, lejos de caer en un revisionismo histórico, busca las formas en el que el mal se ha manifestado históricamente y como este se ha justificado en aras de defender sus acciones, que fueron consideradas necesarias e inevitables para el desarrollo de las culturas y civilizaciones humanas, sin realmente una base que las justificase.
"La historiodicea busca las consecuencias del mal en la historia y su ocultación de la misma dado que la historia "la escriben los vencedores"."