f. Método empleado en psiquiatría (en particular en psicoanálisis) consistente en someter al enfermo a los efectos de un narcótico para facilitar la labor del médico analista.
La acción sedante e hipnótica conseguida con los narcóticos ayuda al establecimiento de una relación adecuada entre paciente y terapeuta, imprescindible tanto para un correcto diagnóstico como para un tratamiento eficaz.