Yang y el Yin. El primero es activo, positivo, solar y masculino, significa calor, luz, vida, dureza y rapidez, y su energía es mental, consciente y moral. El Yin es el principio pasivo, lunar y femenino, tiene el significado de frío, oscuridad y muerte y también de fragilidad, fle- xibilidad y lentitud, y su energía es material. La medicina china distingue doce órganos en el cuerpo: los órganos yang, que convierten los alimentos en sangre y energía, llamados de taller, y los yin, llamados de reserva. A ellos les corresponden doce meridianos ¿kings¿, líneas superficiales que recorren los dos lados del cuerpo, a los que se añaden dos más llamados anterior y posterior. Los órganos yang constituyen el conjunto de la acción física de la respiración, el sistema genito-urinario y el sistema digestivo, mientras que los yin son el hígado, los ríñones, el corazón, los pulmones, el bazo y páncreas y el sistema circulatorio relacionado con los órganos sexuales. Estos órganos se asocian en pares, yang-yin, cuyo desequilibrio causa un tipo de enfermedad. En los meridianos se encuentran más de ochocientos puntos que caracterizan a la acupuntura, y por ellos circula el flujo de energía vital. Al enfermar un órgano, esta energía se desequilibra y la curación reside en el restablecimiento del equilibrio vital. Para lograrlo se insertan dos tipos de agujas en algunos de los tsing, unas sirven para tonificar (yang) y en Europa acostumbran a ser de oro, mientras que otras sirven para dispersar (yin) la energía y suelen ser de plata. Por otra parte, los puntos principales de los meridianos pueden clasificarse en seis tipos distintos: de tonificación (proporcionan energía), de dispersión (eliminan o dispersan energía), manantial (sirven para reforzar los dos anteriores), de heraldo (condensan la energía de un órgano), de asentimiento (actúan direc- Aplicación de una aguja de acupuntura en la mano. tamente sobre las funciones orgánicas) y de paso (restablecen la energía entre pares). En la práctica se hace penetrar la aguja de unos milímetros a menos de dos centímetros en el punto del meridiano determinado, y la punción dura normalmente hasta que desaparece la contractura del tejido. El médico acupuntor se ayuda en el diagnóstico con los catorce pulsos (v. pulso, doctrina del) que distingue la medicina china en diversos puntos y a distintos niveles del cuerpo humano. Actualmente la medicina occidental considera que la acupuntura es útil en las enfermedades de tipo psicosomático (angustia, náuseas, taquicardias, etc.), como analgésico o calmante y en las alteraciones funcionales. También se considera eficaz en otras muchas enfermedades, excluyendo las infecciosas y las lesiones orgánicas, en las que puede calmar el dolor pero no puede restablecer la salud,