Característica de las filosofías cínica y estoica, porque debían decir lo que pensaban. Existe también en retórica con una vuelta de concepto, ya que es el uso de frases en apariencia recriminatorias, pero en verdad halagüeñas y respetuosas para quien las oye (esto es así porque la honestidad es una forma de respeto). Proviene del griego παρρησια (parresía "decirlo todo" formado por παν (pan "todo") + ρησις (rhesis "locución, discurso"); y cabe aclarar que en español no lleva tilde ni se rompe el último diptongo. Ver cinismo, estoicismo.
"Cuando discuto con alguien que aprecio suelo usar la parresia, abusando de su ignorancia, por supuesto. (OK, sí, soy un mal bicho. 😒 )"