albúmina f. Proteína soluble en agua y coagulable por el calor, presente en el plasma sanguíneo; principal constituyente de la clara de huevo.
La albúmina es la más abundante de las proteínas presentes en el plasma sanguíneo (alrededor de un 60 %). Realiza una importante función de transporte a través de la corriente sanguínea, haciendo llegar hasta los tejidos muchas sustancias (vitaminas, fármacos, sustancias nutritivas, etc.) que se fijan a ella de forma reversible; interviene en la regulación de los intercambios de agua entre capilares y tejidos, y contribuye considerablemente a la presión de atracción del agua por parte de las proteínas (presión coloidal osmótica). La disminución a niveles patológicos de la cantidad de albúmina en la sangre produce una reducción de la citada presión, con el consiguiente paso de agua a través de las paredes en los intersticios de los tejidos o en las cavidades serosas, dando lugar a edemas y ascitis*. La albúmina, en condiciones normales, no suele atravesar el filtro formado por los glomérulos renales; de ahí que sea muy importante el examen de la albúmina en la orina en
caso de posibles enfermedades del riñón, ya que, al ser su molécula de menor peso y tamaño que los de las demás proteínas plasmáticas, es la primera que se encuentra en la orina en algunos trastornos renales. Mediante electroforesis* se puede dosificar la albúmina d<el plasma sanguíneo y observar sus variaciones, las cuales son indicativas en gran número de procesos patológicos. Para la preparación de albúmina del suero de la sangre y de la fracción de proteína plasmática (FPP) se utiliza el fraccionamiento de una mezcla de plasma de muchos dadores. El FPP es una solución de proteína al 5 % que contiene por lo menos el 83 % de albúmina (y hasta el 17 % de globulinas alfa y beta) y la albúmina se expende en concentraciones al 5 y 25 % en solución fisiológica regulada. Ambos preparados se emplean como expansores volumétricos, y presentan la ventaja de no acarrear riesgo de hepatitis ni de incompatibilidades sanguíneas (no contienen anticuerpos de grupo sanguíneo). Sus principales inconvenientes son la falta de factores de coagulación y el riesgo de hipotensión. Se utilizan principalmente en las disminuciones graves del volumen total de sangre,
