aracnoiditis, y presenta diversas formas cuya sintomatología depende de la región afectada. Así, se habla de aracnoiditis espinal, aracnoiditis optoquiasmática (inflamación de la región del quiasma óptico), aracnoiditis rolándica, etc. La terapéutica está basada fundamentalmente en inyecciones de yodo por vía subaracnoidea o pa-renteral; en los casos en que el foco inflamatorio está bien delimitado puede ser aconsejable intervenir quirúrgicamente.