aterosclerosis
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En la aterosclerosis los lípidos se acumulan formando ateromas que obstruyen la luz de la arteria.
les son: angina de pecho, infarto de miocardio, hipertensión arterial, crisis de claudicación intermitente de piernas, crisis de dolor abdominal después de las comidas, infarto o reblandecimiento cerebral, etc. La lesión básica de la aterosclerosis es la placa de ateroma*; en estadios tempranos se encuentran placas escasamente distribuidas, pero al avanzar la enfermedad se tornan más numerosas, llegando a cubrir la totalidad de la superficie de la luz arterial. Entre las principales consecuencias de esta situación destacan la calcificación y oclusión de la luz arterial, ya sea por las propias placas de ateroma o por la formación de trombos sanguíneos a su alrededor, y la lesión de las fibras elásticas. No se conocen todavía las causas de esta enfermedad, pero se sabe que determinados factores están en consonancia con la misma: edad adulta, sexo masculino, antecedentes familiares de la enfermedad, régimen alimentario rico en grasas animales, obesidad, hipertensión arterial, consumo de tabaco, personalidad de tipo agresivo y enfermedades metabólicas (diabetes mellitus, hiperuricemia, etc.) entre otros. La evolución de la enfermedad es lenta, desde que se empiezan a presentar lesiones características, a los 20 años de edad, hasta que se presenta clínicamente, alrededor de los 50. Este período de tiempo, en el que no hay síntomas, sería el momento indicado para prevenir la enfermedad, sobre todo en personas con antecedentes familiares de padecerla o afectos de enfermedades metabólicas predisponentes, a base de respetar una dieta pobre en grasas y en hidratos de carbono, realizar ejercicio físico moderado, controlar la tensión arterial y evitar el consumo de tabaco y alcohol. Cuando en un paciente se ha presentado la enfermedad clínicamente, se puede intentar detener la evolución de la misma mediante una dieta exenta de grasas, la administración de fármacos que impidan su asimilación y faciliten su eliminación, y evitar la aparición de otras complicaciones con la administración de vasodilatadores, fibrinolíticos y anticoagulantes, entre otros. Por último, la cirugía permite solucionar algunos problemas circulatorios mediante la implantación de un «by-pass», conducto que sustituye la zona arterial ocluida restableciendo la comunicación entre los dos tramos vasculares.
aterosclerosis f. Enfermedad arterial generalizada en la que se produce un endurecimiento, como consecuencia de un engrasamiento y pérdida de elasticidad, de la pared arterial.
La aterosclerosis constituye la primera causa de mortalidad de la civilización moderna. Esta patología afecta, en mayor o menor medida, a la práctica totalidad de la población después de la adolescencia, pero no suele dar síntomas de su existencia hasta que el proceso está muy avanzado. Los territorios más frecuentemente afectados son la arteria aorta, sobre todo el tramo abdominal, y las arterias coronarias, cerebrales y renales. Las manifestaciones clínicas habitua-
