embolia f. Oclusión parcial o completa de un vaso por una masa intravascular sólida o gaseosa desprendida, que es transportada por la sangre.
Según su lugar de origen los émbolos pueden quedar atascados en un sitio u otro del sistema cardiovascular, en la gran circulación o en la pequeña. Los émbolos que viajan por la circulación mayor casi siempre se originan de trombos a partir del ventrículo izquierdo o de la aurícula izquierda, a veces de trombos que se forman por encima de placas ate-roscleróticas (v. ateroma) de la aorta, etc., y en general provocan infarto de las partes afectas. Las embolias venosas suelen aparecer en individuos con trastornos de la coagulación sanguínea que tengan propensión a la hipercoagulabilidad. Estos émbolos que se originan en las venas así como los que tienen su origen en el corazón derecho, llegan al pulmón por la arteria pulmonar, por el contrario las embolias del corazón izquierdo y aorta van hacia las arterias de la circulación mayor: arterias renales, femorales, etc. En el supuesto de que el agujero oval del corazón permanezca abierto o existan defectos en los septos cardíacos pueden aparecer embolias paradójicas, en este caso material de la circulación venosa puede pasar a través de este defecto y producir una embolia en el sistema arterial.
¿ embolia amniótica: entrada de líquido amniótico en la circulación materna. (Se produce durante el curso del parto, y puede originar un cuadro de coagulación intravascular diseminada [CID] debido a las sustancias que contiene el líquido amniótico.) ^
¿ embolia gaseosa: la producida por burbujas de aire que alcanzan la circulación y actúan como masas que coalescen (fusionan las partes en contacto) hasta alcanzar un tamaño que puede ocluir un vaso de gran calibre, sobre todo en el pulmón y cerebro.
¿ embolia grasa: oclusión de los vasos por glóbulos de grasa. Tiene lugar tras lesiones traumáticas en tejidos cargados de grasa, como en el caso de fracturas óseas. Su importancia depende del volumen y la cantidad de glóbulos de grasa; en determinados casos no ocasiona ningún síntoma, mientras que en otros puede ser mortal.
En la embolia, un vaso queda obstruido por una masa sólida.
¿ embolia pulmonar: oclusión de las arterias del árbol pulmonar por émbolos.
Su importancia depende del volumen del vaso ocluido y del estado del sistema cardiovascular. Los émbolos pueden producir un infarto del pulmón, la obstrucción permanente de los vasos o bien pueden resolverse y volver a la normalidad. Clínicamente si aparece una sinto-matología será respiratoria, con disnea (dificultad respiratoria), tos, y dolor torácico esternal. Otras veces puede aparecer un trastorno de tipo neumónico, con tos, derrame, hemoptisis (expectoración de sangre) y fiebre, que suele corresponder a un infarto pulmonar,
