m. Derrame de serosidad o líquido en el interior del pericardio (saco membranoso que envuelve al corazón), sin reacción inflamatoria.
El líquido que atraviesa la membrana pericardíaca aparece en los mismos casos que el hidrotórax' o que la hidropesía'; es decir, por motivos circulatorios o renales. Generalmente, sus síntomas quedan oscurecidos por las llamativas manifestaciones del proceso circulatoi io, renal o tiroideo que lo produce. La sintomatología se limita, por lo general, a un fenómeno de ensanchamiento de la zona de opacidad cardíaca. La pericardiocentesis (punción de la cavidad) demuestra el origen no inflamatorio del derrame. El tratamiento corresponde al de la enfermedad causal.
