Es el nombre de un juego donde una inteligencia artificial representada por el genio Akinator salido de una lámpara mágica trata de adivinar un personaje pensado por el jugador a través de preguntas específicas que solo pueden ser respondidas con "sí", "no", "no sé", "probablemente sí", "probablemente no". El software fue desarrollado en 2007 por Jeff Deleau y Arnaud Magret, quienes no dan mucha información sobre el origen del nombre; que podría estar inspirado en el filósofo Tomás de Aquino, quien buscaba la verdad consultando todas las fuentes a su alcance (😕), o quiza directamente del latín quid ("¿qué es?, ¿qué cosa?"), en ambos casos reemplazando el digrafo /qu/ por una /k/.
"Por supuesto que las etimologías previas son divagaciones."