1. Aceptación de lo que es, luchar por lo que debe ser. Según lo expresa la filósofa Simone Weil. 2. En una línea más nihilista, se utiliza para describir una actitud en la que uno ve todo lo que sucede como bueno o necesario, incluido el sufrimiento.
"Para el amor fati, se acepta el destino, pero no se renuncia a cambiarlo."