Femenino. Nombre propio de persona, vasco. Es el hipocorístico (de cariño) de Aránzazu, advocación de la virgen María. Está compuesto por: a) ara: montaña extensa, sierra; b) antz (de an: elevación, y tz: contracción, extremidad): picacho (metafóricamente pincho, espina); c) a: sufijo locativo; d) zu: desinencia abundancial. Es decir, sierra de abundantes picachos, alusiva a la orografía donde se erige el santuario de Aránzazu, cerca de Oñate, en Guipúzcoa. Popularmente se atribuye la etimología a: 1) arantz: espino; 2) an: en; 3) zu: tú, o sea «tú en el espino», referente a la aparición de la virgen sobre un espino. (Información tomada del «Diccionario etimológico comparado de los nombres propios de persona», de Gutierre Tibón)