Puede tratarse de dos acepciones que resultan muy distantes una de otra. La actitud humilde, del que confía toda su actividad en el ser supremo, ( Dios)...y "SE PONE EN SUS MANOS". O bien se puede decir del que, al estar en un gran problema, ha perdido toda esperanza de resolver el problema por sus propias fuerzas, o de sobrevivir, y se "entrega en manos de Dios", no por un acto de devoción, sino como una última reacción de impotencia y desesperación, propia de un desesperado de última hora.
"Y cuando se vio rodeado por el enemigo, comprendiendo que había llegado su última hora, se puso en manos de Dios."
* Solo un "me gusta" por significado y día, a mayor número de "me gusta" el significado aparecerá más arriba en la lista