Se trata del primer coro de la segunda jerarquía angélica, conformada junto con las Potestades y Principados. Como príncipes, los ángeles de las Dominaciones, según Dionisio Areopagita, rechazan todo lo que es vano, para estar siempre contemplando la verdad de Dios, y compartiéndola, llevándola a toda la creación.
"Se dice que los que conforman las Dominaciones tienen la misión de guiar a los Ángeles inferiores."