Palabra rumana derivada de la latina fons fontis: fuente, manantial, fontana; esta última también existe en italiano y en catalán. Los rumanos guardan memoria de la masacre de Fantana Alba causada por la guardia fronteriza de la antigua Unión Soviética el 1 de abril de 1941 contra la población rumana que cruzaba la frontera con lo que actualmente es Ucrania en el valle de Bucovina junto al río Siret.
"En el país leonés también se dice fontano, fontana y fontanina"