Arma incendiaria de los griegos del Imperio Bizantino que lanzaban contra los barcos enemigos quemándolos irremisiblemente. Aunque la fórmula era secreta, se cree que la mezcla estaba constituída de petróleo, cal viva, azufre, salitre y resinas. La cal viva en contacto con el agua sería quizá la chispa incendiaria.
"El fuego griego ha sido uno de los secretos militares mejor guardados"