Gente de vida poco recomendable, gente de mal vivir, rufianes y delincuentes. Ya se les llamaba así en el siglo XVI como pone de manifiesto la escritora María Inés Chamorro Fernández en su Diccionario de Villanos, subtitulado Diccionario de Germanía: Lengua de jacarandina, rufos, mandiles, galloferos, viltrotonas, zurrapas, carcaveras, murcios, floraineros y otras gentes de la carda. María Inés también ha escrito sobre la gastronomía del Quijote.
"Mi abuelo cardaba la lana en las noches de invierno, pero no era de la gente de la carda."