Jerigonza literaria de algunos personajes de Rayuela que ocultan sus asuntos amorosos al lector. Cortázar, su creador, toma algunos términos del lunfardo, aunque la mayor parte resultan de una fonética musical con raíces semánticas españolas y grecolatinas. Veo que algunos en el Diccionario lo llaman gíglico o guíglico, pero el propio Cortázar en el capítulo 4 de Rayuela lo llama glíglico probablemente a partir de la reduplicación de la raíz griega de glykys, dulce, agradable como la glucosa del mosto de las vendimias griegas.
"El glíglico es un lenguaje lúdico y encriptado"
Es otra forma de llamar al lenguaje gíglico cortazariano, que por lo que comenta el colega Felipe Lorenzo del Río debería ser la correcta.
"Siempre tuve la duda si originalmente se llamó glíglico o gíglico."