Son estructuras microscópicas, cuya matriz está constituida por polímeros sintéticos capaces de captar una cantidad de activos cuya liberación es controlada bajo ciertas condiciones. Los activos quedan fijados a la matriz y una vez aplicada la firma cosmética sobre al piel, los principios activos difunden desde los poros de la matriz hacia la periferia y llegan al medio que la rodea. Se logra así una liberación pausada, continuada, y al igual que con otros sistemas de transporte, se minimizan los riesgos de sobreconcentración de activos en la superficie cutánea y la posibilidad de reacciones adversas.