Leyenda del castillo de La Yedra en Cazorla (Jaén) de una princesa mora ocultada en las mazmorras por su padre ante el ataque de los cristianos que terminaron eliminando a sus enemigos. Sola, aterida de frío y olvidada terminó convirtiéndose en una serpiente. En la noche de San Juan se la puede oir cantar con dulce voz: "Yo soy la tragantía/, hija del rey moro./ El que me oiga cantar/ no verá la luz del día".
"Los niños de Cazorla por San Juan se acuestan pronto para no oir la Tragantía"