Se le dice verboides a las inflexiones verbales que parecen más un sustantivo, adjetivo o adverbio que a una forma de conjugación. Por lo general en estos casos, el infinitivo parece más un sustantivo, el participio parece más un adjetivo o el gerundio parece más un adverbio. Ejemplos:
1. Para el caso de infinitivo el verbo parece sustantivo. Es que el amar y el querer no son iguales, el grado de compromiso es diferente.
2. Para el Caso del Participio que parece adjetivo. Me gusta comer huevo frito.
3. Para el caso del Gerundio que parece un adverbio. Cuando se refleja simultaneidad de acción: Me estaba bañando. O que indica modo: Juanita entró corriendo y llorando.
Usado así en Colombia
"El amar no es cosa fácil (Infinitivo), Me gusta el huevo frito (Participio). Me estaba duchando cuando llamaste (Gerundio)."
Aunque proceden de verbos, los verboides no comparten todas sus características, pueden carecer de tiempo, persona y/o número. Los ejemplos más comunes en español son los infinitivos o los gerundios, que sintacticamente no funcionan como acción o verbo.
"Los infinitivos como saltar, correr, vivir, o los gerundios como rodando, deteniendo o muriendo son verboides."